Me ha dejado de importar lo importable, he dejado de repetir tu nombre a diario, de imaginar conversaciones que no han sucedido, He dejado de escribir tu nombre en el borde de mis cuadernos, de dibujar corazones por doquier, he dejado de pasarme las tardes mirando tus fotos, he dejado de imaginarnos, he dejado de quererte, he dejado de pensar, de escuchar nuestras canciones, de pasar frío para que me abraces, de tus manos, de tu sonrisa. He dejado de escucharte si me hablas, de ver como miras a otras, de mirar tus comentarios, de tu humildad, de tu culpabilidad de mi imposibilidad o mi improbabilidad, He dejado de culparme por que te hayas ido, de que tus besos ya no sean mi adicción. He dejado de decir la verdad.